VISIÓN POLÍTICA

Lic. Tomás Rivera, es dirigente del PRD en Pensilvania

Por: Lic. Tomás Rivera.

Duele decirlo, pero mucho más el no hacerlo, la nueva crisis que atenaza al Partido Revolucionario Dominicano, no es más que un reflejo de la involución que en sus concepciones y principios socialdemócrata ha estado viviendo el partido por más de 30 años.  En este lapso de tiempo, muchas han sido las ocasiones que los procesos críticos les han ofertados a la organización, para que profundizando en las raíces y/o causas históricas de nuestras deficiencias, así como reinterpretando la cambiante  situación internacional, podamos ajustarnos a los mismos, y ofrecer alternativas viables para el bienestar popular.

Los líderes visionarios del PRD, tienen la responsabilidad de romper el círculo vicioso de responder males con males, los cuales nos hacen más que alargar el camino del sacrificio y la autodestrucción.  Hace ya mucho tiempo que hemos estado viviendo en un partido único, pero fraccionado, y ahora estamos a punto de pasar de este estado, al de un partido escindido. La ecuación es simple: de la fracción dentro del partido a la escisión del mismo. Varios elementos distinguen este proceso, tales como:

1. El no reconocimiento de una dirección institucional única, democráticamente electa
2. La ruptura del diálogo para facilitar las vías que traigan solución y esperanza
3. La adopción de estilo de vida en donde los intereses individuales pasan a ser prioritarios, antes que las aspiraciones estratégicas y de principios  de la colectividad
4. La oficialización del consenso como método principal para  solucionar las diferencias internas, en desmedro de la aceptación voluntaria y consciente de los acuerdos de la mayoría en cada situación dada.
5. La falta de visión del curso de los procesos históricos, y de la necesidad de renovarse continuamente, agitado por el predominio de la visión individual y grupal, aleja a dirigentes del partido de encontrar soluciones reales a la crisis.

En la actualidad el epicentro de la crítica, se cierne sobre el presidente del partido, al cual se acusa de una derrota electoral de la cual él, a todas luces, no es responsable, sin que esto no quiera decir que haya incurrido en error alguno. Los promotores de esta líneas de sacar a Miguel Vargas, estarían asumiendo la ruta de “división fácil”, ya que aferrándose a un método incorrecto de tratar los problemas internos en un partido socialdemócrata,  repetirían el viejo role de no encarar con conciencia, conocimiento, y serenidad los diferentes aspectos de una situación que por su permanencia en el tiempo va adquiriendo un rostro cada ves más patológico, y esto lo expreso por el uso cada ves más notable de la violencia, violencia que ahoga el diálogo que distingue a todo socialdemócrata en la construcción de la sociedad a la que aspira.

El camino de la división representa el más fácil porque el mismo no se encamina a corregir las fallas, de las cuales todos somos responsables, sino a escindir una parte de la organización bajo el supuesto de que es la parte que debe cargar con la culpa. El “camino de  la división fácil, se parece a la imagen de aquel perredeísta que está perdido en la oscuridad del túnel, y portando una linterna en sus manos, sólo atina a enfocar horrorizado el rostro de aquel que le acompaña. Tal vez sea propicio recordar la voz de Peña Gómez: sólo el PRD, vence al PRD.

Finalmente sería propicio recordar el aporte que hiciera la reconocida intelectual  Belga Chantal Mouffe en uno de sus libros titulado “en torno a lo político”, traducido al Español en el 2007. En el primer capitulo acerca de los políticos y la política, Mouffe plantea lo inútil de llegar a un consenso sin exclusión, como ha sido lo habitual, ofreciendo lo que llama teoría agonística, la cual adversa la antagónica de la política. Lo más notable de las ideas de Chantal Mouffe está en lograr a lo interno de las organizaciones socialdemócratas, una relación adversarial, sin que se transforme en relación amigo-enemigo radical, la cual para mí, siempre termina en ruptura del diálogo, exclusión y escisión del movimiento.

Pennsylvania

Junio 15 de junio de 2012